
Altar para todos
Un altar donde Tlaloc, la Virgen de Guadalupe, deidades mayas, de Santería, una ranas de Feng shui, oraciones de Falun Dafa y prendedores de Sai Baba, ángeles y demonios, tienen su espacio. En el espejo del centro uno se refleja, para verse rodeado de todas estas representaciones de lo sagrado, que dan una sensación de protección. El espejo infinito, al encenderse, hace alusión al Tao, a lo que no se puede representar y sin embargo, existe.
El tema de esta obra es la fe, las fuerzas invisibles, la aproximación a lo intangible y lo superior, visto a través de diferentes culturas en objetos populares.
Fueron más de 20 años de trabajo para recopilar y clasificar miniaturas con el tema de las creencias. Los objetos que la conforman, fueron hechos con una intención que va más allá de tener uso práctico. En su mayoría, provienen de lugares recorridos por Amanda de la Rosa, en su búsqueda de la expansión de la consciencia. Conservan la energía del lugar y del momento. Por ejemplo, hay un prendedor que dice “Martha”, que usó su abuela en un retiro católico. Colgando está un Hanuman, en una figura color naranja fosforescente, que trajo Amanda de un templo consagrado al dios mono, en los Himalayas y así, cada pieza tiene su su carga energética.
PESO: 7.2 KGS
2018

